24 de julio de 2023

Yo digo


24 de Julio




                                                                   

 

2 de agosto











Mi primer libro de Murakami fue Tokio Blues. 
Soy un romántico empedernido, así que blanco y en botella. 
Y lo único que puedo decir es que tardé una semana en leerlo.
Ahora estoy terminando de leer las mil páginas de 1Q84. 
Murakami nunca me defrauda.




Luego de un consistente entrenamiento de series de los lunes, buscaría el sueño de los justos y, de esa manera, sentirse aliviado.
Desconocía si lo obtendría, pero necesitaba que ocurriera.
Pero el mundo en el que se despertó a la madrugada luego del sonido de su celular no parecía el mismo en el que se había dormido.
Debía levantarse rápido, vestirse y salir en auxilio de un ser querido que la estaba pasando mal.
Felizmente, todo salió bien. Pudo volver a su casa y tratará, tarea difícil, de conciliar el sueño, 
Domingo, fondo, lunes, series, martes, fuerza.
Al menos esa era el plan. 
Por la mañana parecía que no ocurriría nada anormal. 
Pero en el camino al gimnasio vuelve a sonar el celular. El llamado lo alerta de un nuevo suceso de cierta gravedad en su propia casa.
Ocurre que él le dió cobijo a dos perras callejeras hace unos años. 
Lo que no imaginó cuando las rescató, es que las hijas de puta eran miembros del club de la pelea. Secta que nunca avisa cuando se llevarán a cabo los enfrentamientos. 
Como los personaje del famoso film quizás padezcan de trastorno de identidad disociativo y lo hagan para llenar un vacío interior. Vaya uno a saber.
Y en el día de hoy, como otras tantas veces, se produjo la refriega.
Como cabía esperar, la dueña de casa, en la desesperación por evitar una desgracia, se propone separarlas. Grave error. En la ceguera de la pelea una de ellas le destroza una pierna.
Luego, la historia conocida, clínica, medicamentos y reposo.
Sin embargo, el amor, que todo lo puede, impide represalias.

(Este relato en tiempo real quizás sea ridículo pero él hace el ridículo muy a gusto y eso lo libera de responsabilidades y, de a ratos, es feliz.)





Debo decir con Borges que como ser humano, soy una especie de antología de contradicciones, de 'gaffes', de errores, pero tengo sentido ético. Eso no quiere decir que yo sea mejor que los otros, sino simplemente que trato de obrar bien, y no espero castigo ni recompensa. Que soy,
digamos, insignificante, es decir, indigno de las dos cosas. El cielo y el infierno me quedan muy grandes.





Al que le abruma superar la página 400 de un libro, leer las mil páginas de 1Q84 es un acto de fe.
Aunque es un libro complejo se lee con facilidad.
Ambientada en Tokio en 1984, esta historia sigue a dos personajes: uno, que se da cuenta de que ha ingresado en un universo paralelo, y otro, un aspirante a escritor que asume un extraño proyecto de escritura fantasma.
Una historia de amor en un universo orwelliano. Y de realismo mágico.
La eterna búsqueda del ser humano de algo 
(y ese algo es diferente para cada uno de nosotros, y, además, a veces no tenemos ni la más remota idea de qué es ese algo). 
Pero bueno, cualquier buena novela se dedica a hurgar en ese algo.
Al que le interesa leer a Murakami el consejo es comenzar con cualquiera de los otros libros.
Sin solución de continuidad comienzo a leer el último libro de la saga.




Gopal reivindica, desde su creación allá por los noventa, un estilo de alimentación saludable. Con la participación de Lola, un baluarte histórico, que continuaría junto con su hijo Bernardo, merece estar en la categoría de una obra inigualadamente notable.
Apenas basta con ver lo que ofrece para darse cuenta las variadas posibilidades para alimentarse sanamente.
Una injusticia sería, por otra parte, no reconocer lo importante que representó para mí, un adicto al vegetarianismo, una rara avis en ese momento, encontrar ese lugar recién inaugurado.
De todos modos, lo gravitante es que, además de lo aportado en el recorrido, hoy sigue siendo un lugar donde el alimento puede ser tu medicina.







Dante describe al infierno con nueve círculos. 
En el primero están, por ejemplo, los no creyentes y los castigos son menores. 
En el noveno, el peor, solo habita Satán por traicionar a Dios. 
El octavo es el reservado a los políticos corruptos, por traicionar a todos los demás. 
Están sumergidos en brea hirviente, que representa los dedos sucios y los oscuros secretos de sus tratos corruptos. Y torturados eternamente por demonios.
Ahí le esperan muchos "compañeros de lucha" a gatúbelo.





De todas las historias de la historia la más triste es la de Argentina
Porque siempre termina mal, como si el hombre harto ya de luchar con sus demonios,
quisiera terminar con esa historia de este país de todos los demonios.
A menudo he pensado en esos hombres, a menudo he pensado en la pobreza de ese país de todos los demonios.
Y a menudo he pensado en otra historia distinta y menos triste en otra Argentina
En donde ya no cuenten los demonios en donde ya no cuenten los demonios.
Pido que Argentina expulse a esos demonios. y que los argentinos sean dueños de su historia.


Domingo 8 de Octubre

Domingo con bastante concurrencia en el corredor.
Dos cosas destacables de la experiencia.
Comprobar, nuevamente, la irascibilidad de los ciclistas fanáticos. 
A la entrada del Velódromo se había producido un incidente entre una veterana ciclista veterana y una joven amateur.
Con las bicicletas tiradas en el camino la experimentada le reprochaba a la pendeja, a viva voz, con todo tipo de insultos, por su falta de experiencia y advirtiéndole que el velódromo era para experimentados.
No valía la pena detenerme para ver el final de escena.
 Y lo agradable fue cruzarme con amigos.
Leo, entrenando bicicleta, preparándose para el Ironman.
Susana, con su rutina de running.
Seba, recuperándose de la maratón de Buenos Aires. 
Julito, caminando para dejar el sedentarismo. Nata, la compañera del team, adoptando la buena costumbre de hacer fondo.
Y finalmente, un corredor al que suelo cruzar, que se me pone a la par en el último km. para  charlar sobre las corridas.
Termino haciendo un ruego para que las Leyes del Universo sean anuladas en nombre de un único peticionario, inconfusamente indigno.



La sociedad siempre está cerca del desastre cotidiano, lo fácil que es que una vida se tuerza, incluso en países con poca criminalidad. 
Es terrible. Muestra lo fácil que es que tu vida se vaya al infierno en un momento. 
Incluso en las sociedades más evolucionadas, en las que se ha impuesto una estructura social que controla todo, al final el hombre derrapa.
Una estafa, un robo o un accidente, siempre hay cosas que suceden habitualmente en la realidad. Sin embargo, algunas pasan desapercibidas y otras son más mediáticas. 
¿Qué hace que un caso sea más mediático que otro?
Buena pregunta. Quienes están implicados y los elementos sensacionales.
Es una tendencia reaccionaria y reduccionista creer que la responsabilidad recae sobre quien habita los márgenes, en el aislamiento y la pobreza estructural.
De hecho, nuestro céntrico barrio, se convierte de repente en la Santa María de Onetti, un lugar maldito donde habitan las putas y los tahures.
En una misma semana, desaparece la visión idílica del barrio para dar paso a unos personajes poco fiables, acusados y señalados por delitos aberrantes.
En un triángulo geográfico de cincuenta metros de lado, en uno de los vértices se encuentra un concurrente a la sede de Boca, y en otro el dueño del super chino, ambos acusados de ser parte de la mafia china.
Y en el otro vértice, al dueño del edificio de departamentos que se lo llevan por trata de personas.
Téngase en cuenta que la gente de bien no será responsable si en poco tiempo volvemos a ver a esos personajes caminando el barrio como buenos ciudadanos.





A ver si puedo ser claro: Milei y su banda no me gustan mucho pero muchísimo menos
me gustan Massa y sus secuaces y dejarle al país 20 años más de kirchnerismo. 
Si gana Milei se lo podrá enfrentar en el Congreso y en las próximas elecciones. 
Si ganan Massa y el kirchnerismo vayámonos despidiendo de la división de poderes, de la Constitución y de un país posible.
Ojalá las opciones fueran otras, ojalá hubiesen votado otra cosa, pero por más que lloremos y pataleemos es lo que hay y sobre eso tenemos que decidir. 
Y no, para mí ser neutral con el kirchnerismo tratando de quedarse otra vez con el país no es opción.